
La lectura se me hizo interesante, porque deja bien en claro a través de metáforas para poder dar a entender los conceptos que maneja en la lectura, además que algunos conceptos ya nos los habían explicado en las distintas charlas que nos han impartido en esta primera parcial, en la clase de Nuevas Tecnologías y eso fue lo que me ayudó a digerir más fácilmente la lectura, aprendí mucho, ya que integre nuevos conocimientos a mi vocabulario.
Edgar menciona, que el Internet es muy difícil de definirlo, porque cada quien lo interpreta desde la perspectiva que lo ve y como mejor le parezca, como hay un dicho que decimos en México, “cada quien habla como le fue en la feria”. Pero es un hecho que el Internet tiene ventajas, como el tener comunicación con amigos y familiares que se encuentran en otros países, sin la necesidad de transportarnos a ese lugar y las desventajas, es que se ha utilizado el interne en malos términos, como el hecho de subir pornografía, por lo que debemos de tener un criterio amplio para tomar las cosas que son productivas, y lo demás desecharlo, aunque a veces también se aprende de las cosas malas. Aún con todo esto, el Internet es una gran tecnología que se ha estado evolucionando día con día y en la cual podemos accesar, para obtener información, dándonos cuenta de lo que esta pasando en el mundo entero.
El libro “La muerte del ciberespacio” se divide en 3 capítulos; el primer capitulo habla acerca del concepto de ciberespacio, en la cual menciona la historia de este término, que se remonta a los estudios cibernéticos de los años 50. Después se establece el análisis de la corriente llamada Ciberpunk, y para terminar, se discute la conexión entre la Realidad Virtual gráfica y los primeros estudios sobre la Comunicación Mediada por Computadoras (CMC), y como se logró la conexión para que el concepto se adoptara a una cibercultura.
El segundo capítulo, se enfoca al concepto de comunidad virtual, en el que establece los vínculos con tres actores que son: Licklider, Howard Rheingold y Steve Jones. Y por último en el tercer capitulo, hacen un análisis sobre la identidad virtual y se hace una discusión sobre el trabajo de Elizabeth Reid y el libro de la psicología del MIT Sherry Turkle.
Primero que nada, Edgar Gómez empieza por definir que es ciberespacio. Él dice que “si se comenzara por establecer el contexto lingüístico en el que se originó el concepto, habría que decir que éste proviene de la unión de dos vocablos que académicamente resultan complejos por los diferentes significados que se les han dado en distintos contextos; éstos son cibernética y espacio”. Por lo que el término, en el lenguaje popular, comenzó a aplicarse a todo lo relacionado con el uso de computadoras, principalmente aquellas conectadas al Internet, y que de esta forma surgió el ciberespacio, la cibercultura, la cibersociedad, los cibercafés, etc.

Algo que me pareció muy interesante, fue lo que dijo el autor David Bell, acerca del ciberespacio. Él menciona: “Pienso en él como combinando tres cosas (…) Tiene dimensiones materiales, simbólicas y de experiencia. Es máquinas, cables, electricidad, programas, pantallas, conexiones y es modos de información y comunicación: correo electrónico, sitios web, chat rooms, MUDs. Pero es también imágenes e ideas: el ciberespacio existe en el cine, en la ficción, en nuestras imaginaciones, tanto como en nuestros escritorios o en el espacio entre nuestras pantallas”.
Se tiene una variedad de conceptos de diferentes medios y autores acerca del ciberespacio, por lo que no hay un concepto principalmente definido de éste. Pero lo que si podemos decir es que el ciberespacio, se refiere a un “espacio (artificial, virtual, irreal) creado por la comunicación a través del ordenador”. Y por lo tanto la mayoría de textos da por hecho que éste es un espacio que, si bien no es físico, sí tiene las propiedades de uno físico, así mencionó Edgar.
Otro autor, que me pareció interesante de lo que dijo acerca de la Realidad Virtual, fue Jaron Lanter. Él menciona: “Lo que es de remarcadamente hermoso en la Realidad Virtual es que tú puedes construir la realidad en la Realidad Virtual y compartirla con otras personas. Es como tener un sueño colaborativo lúcido. Es como tener alucinaciones compartidas (…) Puedes componer el mundo externo en cualquier forma como un acto de comunicación (el línea)”.
Por otro lado, Woolgar, en su amplio estudio publicado en el libro Virtual Society?: Technology, Cyberbole, Reality, establece las cinco reglas de la virtualidad:
La adopción y uso de las nuevas tecnologías dependen crucialmente de los contextos sociales locales.
Los miedos y los riesgos asociados con las nuevas tecnologías son distribuidos socialmente de manera desigual.
Las actividades virtuales suplementan más que substituyen a las actividades reales.
A más virtual, más real.
A más global, más local.
Edgar en su investigación, hizo hincapié en el concepto de comunidad virtual, pues dijo que es quizá el concepto clave en los estudios sobre Comunicación Mediada por Computadora. Durante casi toda la década de los 90, e incluso en muchos ámbitos de los Estudios de Internet, se ha utilizado como una de las guías y bases teóricas para muchos de los trabajos desarrollados sobre la CMC.
Otro punto que me llamo la atención, fue lo que dijo Licklider: “La mente humana no va a ser remplazada por una máquina, al menos no en un futuro cercano, pero existe poca duda de que la disponibilidad mundial de amplificadores de la fantasía, maletines (toolkis) intelectuales y comunidades electrónicas interactivas va a cambiar la forma en la que las personas piensan, aprenden y se comunican”.
La lectura de Edgar Gómez , en general me pareció buena, porque explica cada concepto con diferentes autores, aunque a veces uno como lector es un poco difícil saber escoger con cual concepto, de tal autor quedarse, ya que es tanta la información que da Edgar, que al final no se cual es el autor indicado a seguir. La lectura estuviera mejor si Edgar hubiera mencionado a los principales autores para tales conceptos y así no hacerle dudar al lector cual concepto es el mejor. Es por eso que anteriormente, solo mencione algunos de los tantos autores, de los cuales me llamaron más la atención en lo que dijeron.